lunes, 31 de mayo de 2010

PAISAJE CON DOS TUMBAS Y UN PERRO ASIRIO .

Amigo,
levántate para que oigas aullar al perro asirio.
Las tres ninfas del cáncer han estado bailando,
Hijo mío.
Trajeron unas montañas de lacre rojo
y unas sábanas duras donde estaba el cáncer dormido.
El caballo tenía un ojo en el cuello
y la luna estaba en un cielo tan frío
que tuvo que desgarrarse su monte de Venus
y ahogar en sangre y ceniza los cementerios antiguos.
Amigo,
despierta, que los montes todavía no respiran
y las hierbas de mi corazón están en otro sitio.
No importa que estés lleno de agua de mar.
Yo amé mucho tiempo a un niño
que tenía una plumilla en la lengua
y vivimos cien años dentro de un cuchillo.
Despierta. Calla. Escucha. Incorpórate un poco.
El aullido
es una larga lengua morada que deja
hormigas de espanto y licor de lirios.
Ya vienen hacia la roca. ¡No alargues tus raíces!
Se acerca. Gime. No solloces en sueños, amigo.
i Amigo!
Levántate para que oigas aullar al perro asirio.

Comentario: Desde mi punto de vista ,este poema representa la muerte de un amigo a causa del càncer.

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